Una de las ventajas de Linux es que su diseño facilita al usuario adaptar el escritorio a su gusto. Descubre tres formas de emular Windows con tu distribución.
Dar el paso a Linux cuesta y a pesar de todas sus virtudes, como el hecho de ser libre, gratuito, de excelente rendimiento, lleno de juegos y aplicaciones..., el usuario novel puede verse abrumado al pasar de un entorno Windows a otro gobernado por gestores de escritorio como KDE o Gnome en Linux.
En este práctico, os mostramos cómo cambiar de una forma sencilla la apariencia de nuestro escritorio Linux con el fin de darle un aire a Windows muy particular. He usado la versión 10.04 de Ubuntu con Gnome 2 y el paquete Win2-7, una combinación que te sorprenderá.
Recopilación del material preciso
1. Descarga Win2-7
En este primer paso, nos dirigiremos a la página web por excelencia para encontrar todo tipo de contenido multimedia relacionado con Gnome. Entre los muchos paquetes que podremos conseguir, el que nos ayudará a convertir nuestro entorno en Windows se llama Win2-7 y se puede encontrar en esta dirección. Al pulsar sobre el botón download, procederemos a descargar al equipo un archivo comprimido.
2. Descomprime el paquete
El siguiente paso, una vez descargado el archivo, será descomprimirlo. Para ello, nos dirigiremos al espacio de descargas pulsando sobre Lugares y escogiendo la opción Descargas y localizaremos el paquete obtenido, de extensión tar.tz. Pulsaremos sobre él y elegiremos extraer aquí. Un pequeño gestor se abrirá y descomprimirá el contenido en una carpeta del mismo nombre.
3. Comprueba permisos
Enseguida, entraremos en esa carpeta y localizaremos el archivo GUIinstall.sh. Se trata de un script encargado del proceso de instalación. Es conveniente comprobar si este tiene permisos de ejecución en nuestro equipo; de no tenerlos, nos encontraríamos con la imposibilidad de instalar Win7-2. Para ello, pulsaremos sobre él con el botón derecho del ratón y, a continuación, elegiremos la opción Propiedades. Acto seguido, pulsaremos sobre la pestaña Permisos. Luego, habilitaremos si no lo está la casilla Permitir ejecutar el archivo como un programa.
4. Ejecuta el script en consola
Llegado este punto, haremos clic derecho sobre GUIinstall.sh y marcaremos la opción Abrir. Una pequeña ventana nos preguntará qué acción realizar, escogeremos Ejecutar en un terminal. Con ello, se abrirá una consola donde comenzará a ejecutarse el script. Lo primero que hará será verificar si nuestro ordenador reúne los requisitos para su instalación. Es posible que durante este proceso haya algún componente extra necesario no instalado en nuestro sistema, como Tkinter. El propio script tratará de cargarlo.
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